Descifrando el universo

 XXI: Pensar vs Meditar

¿Es lo mismo realizar un  lógico cognitivo a meditar sobre un tema? ¿Funciona el cerebro de la misma forma? 

Empecemos este viaje por el uso del cerebro como herramienta por dos sendas muy bien diferenciadas. Imaginemos el cerebro, como un computador cuántico paralelo multitarea. Para los que no estéis habituados con el lenguaje informático que acabo de utilizar. Imaginad el cerebro, como las piezas que hay en el interior de vuestro ordenador. Probablemente no sabréis como funciona, pero permite reproducir video, imágenes, cargar gráficos 3D, navegar por una intensa red llamada internet, ejecutar aplicaciones, etc. Y todo ello, gracias a unos pequeños dispositivos que se llaman transistores, acompañados de algunos diodos y otros muchos componentes de materia inorgánica, un software pre-programado por capas, empezando por el sistema operativo, y luego varias aplicaciones llamadas programas. Otros procesos de mantenimiento del sistema de ficheros, protocolos y sockets para las comunicaciones, pipes para el intercambio de datos y muchos otros términos que podría nombrar pero dado que no estoy enseñando ingeniería informática, lo dejaré aquí. Concluyendo que el cerebro funciona igual, pero mucho más eficientemente que el mejor ordenador que os podáis imaginar y con química orgánica, donde su unidad básica es la célula, en este caso el neurotransmisor, llamado neurona.

Todo este párrafo, ha servido para iluminar vuestra mente bajo el concepto que no somos hardware, sino software. Cada persona es un programa informático programado por cada uno de vosotros, como una capa aplicación que funciona encima de una capa de sistema operativo (la respiración, bombeo del corazón, digestión, ojos, oídos, olfato, tacto, y un largo etcétera) que algún día se programó. Sin entrar en detalles, si fue obra de la evolución o del creador de la propia evolución, aquí os dejo unos datos para que meditéis.

A lo largo de muchos escritos, utilizo la expresión, para que lo meditéis. Mis lectores fieles, ya saben que todo lo que digo, lo digo por una razón, porque si lo que voy a decir no es mejor que el silencio, prefiero callar. Ahora bien, nunca he definido el hecho de meditar, así que vamos a ello. Meditar es utilizar, básicamente, la capa del sistema operativo de nuestro ser, el que nos permite respirar y muchas otras tareas en segundo plano, para realizar razonamientos lógicos e intuitivos con el lenguaje de las ideas abstractas. Sería el hecho de sincronizar el cerebro, a través del plano mental y el espiritual en una vibración donde la paz nos invade y las ideas fluyen como si de una corriente de agua se tratase. Es decir, y resumiendo, sería como escuchar la canción de la sabiduría a través del cerebro, donde mediante la imaginación o los manas superiores, dependiendo de tu nivel en la senda de la sabiduría, llegan a nuestra antena las mejores ideas y conclusiones que jamás podríamos haber imaginado o pensado por otro medio. Como si alguien escuchara lo que nos gustaría saber sobre un tema, y nos conectáramos al Internet del universo (la sinfonía cósmica) con nuestro cerebro y el Santo Google Universal nos respondiera directamente. Podría explicar a nivel neurosináptico como se interconectan ambos hemisferios, como las ondas cerebrales aumentan la frecuencia, o como llegan las ideas a través de este estado, pero sólo voy a decir que lo experimentéis por vosotros mismos.

Hacer un simple experimento, y me daréis la razón. No importa cómo funciona (por si os interesa el principio abstracto sobre el cual se basa sería: cuerdas de la dimensión espiritual cruzándose por tu plano mental a través de las dimensiones no densas enrolladas de la matriz universal en la conocida teoría de cuerdas metafísica), lo que realmente importa es que mejora tu ser, porque te abre una puerta a planos de conciencia superior.  Sentados en un sitio tranquilo, se recomendaría estar rodeado de vibraciones puras, véase una playa solitaria o una montaña sin gente cerca, pero sirve una habitación también. Dejar  la mente en blanco, cuanto más en blanco mejor. Respirar pausadamente, relajad los músculos del cuerpo y olvidar toda preocupación o problema. Ir desconectando cada uno de los sentidos, la vista cerrando los ojos, los oídos, el tacto. Concentraros únicamente en la respiración, y aguantad este estado 10 minutos. Veréis como algo dentro de vosotros ha cambiado, y con práctica, no sólo la paz os inundará, sino que pensamientos e ideas que jamás hubierais imaginado entraran en vosotros. Confiad y suerte en la prueba.

En contraposición, voy a explicar el pensar. Me tengo que remontar a la antigua Grecia, donde varios sabios filósofos, crearon unas normas lógicas de pensamiento, que actualmente se llama lógica preposicional y se utiliza para validar premisas en los diferentes lenguajes. El pensamiento básico, es muy parecido a las matemáticas, pero como todo lenguaje concreto, no se mueve tan libremente como gustaría en un mundo cuántico como el universo y todo lo que en él habita.

Pensar, es interpretar lógica y datos para obtener resultados. Pero si fracasan las matemáticas al matematizar la cuántica, como no va a fracasar un lenguaje impreciso como las palabras al interpretar sensaciones, sentimientos, disputas, y miles de situaciones que la sabiduría popular sólo alcanza a decir, no tengo palabras.

Qué explica la situación en la que la mente y el ser saben lo que sienten y lo que les gustaría decir pero no pueden?, Básicamente, el pensamiento forjado a partir de palabras, verbos, sintagmas nominales y verbales es ineficiente para expresar una infinitud de cuerdas cuánticas solapadas. He aquí el hándicap del pensamiento, y el verdadero poder de la meditación. Se trata de pensar con el lenguaje cuántico del universo, y eso significa meditar.