EL REINO DE LOS SERES CELESTIALES
COROS ANGELICOS "Serafines, Querubines, Tronos, Dominaciones, Virtudes, Potestades, Principados, Arcángeles, Angeles"
Es la gran tribu de los Angeles. Por ser sus sub-tribus tan importantes en la Economía Divina, en la Santa Providencia, y en la relación que mantienen con los hombres, esta tribu ha merecido una Disciplina especial en la Teología de la Naturaleza: La Angelología.
Por eso dedicaremos un capítulo en este libro a la descripción de cada sub-tribu. Pero recordemos siempre que es éste el lugar que le corresponde a los Angeles que, aunque manifiestan diferencias entre un coro y otro, poseen, en cambio, grandes semejanzas entre sí, como para que puedan figurar repartidos en esta clasificación de las tribus celestiales.
Hay, sí, dos excepciones:
1. La de los Querubines que forman las Estrellas. Por realizar su misión cambiando el aspecto corporal a una luminosidad fácilmente visible.
2. La de los Querubines que sostienen las Columnas de Fundamento, que estudiaremos en el capítulo consagrado a los abismos, y que tienen permanentemente una fisonomía distinta a la de sus iguales.
Estos dos grupos de Querubines merecen, por el notable cambio de forma, ser clasificados aparte. No hay más excepciones que éstas.
La mayoría de los conocimientos atesorados por la Angelología son Revelaciones que deben permanecer secretas o continuar transmitiéndose de maestro a discípulo en forma oral.
Pero siendo, como es, Voluntad del Señor que los hombres realicen con los ángeles una alianza, y como colaboran en todos los procesos de crecimiento espiritual que se vienen realizando en la tierra, es necesario, que por lo menos, brindemos una presentación mínima de tan esforzadas y buenas criaturas, para que el lector que no ha tenido contacto alguno con los ángeles comience a conocerlos, respetarlos e incluirlos en sus vidas como lo están sus seres mas queridos.
La mas antigua definición de «ángel» es la que se desprende de lo que significa esta palabra en las lenguas antiguas: mensajero.
Mensajero entre el Cielo y la Tierra.
Enviado de Dios para ayudar al hombre, colaborador del Señor en la Creación del Universo. Creación que no ha terminado, pero que está pronta a ser finalizada.
Su jerarquía, dentro de la escala de la dignidad espiritual, es menor al hombre. Pues, aunque no sufre como él y tiene la ventaja de estar cerca de Dios y percibirlo siempre con facilidad, el ángel carece de eso que Dios ha llamado «la semejanza», es decir, el «alma».
Es cierto que, al ser el alma el órgano superior del hombre por el cual, al modo de Dios, arbitra su propia libertad, muchos son los errores y falsos caminos por los que la humanidad ha andado. Y esto ha ocurrido pocas veces a los ángeles quienes, en su mayoría, no han realizado ninguna elección entre el bien y el mal, manteniéndose, por el contrario, fieles a la Bondad Suprema, sin siquiera cuestionárselo.
En todo y para todo, los ángeles sólo se movilizan por medio de un complicado sistema de comunicación que es específicamente ritual. Si éste falta, el ángel no participa, pues no se siente llamado.
Aun en el caso de que un ángel acuda a uná persona que no lo llamó, se deberá tener en cuenta que, si el Señor lo convoca ante ese hombre, lo hará por medio del cuidadoso sistema de ceremonias y gestos que conforman un ritual.
Salvo los Arcángeles, que son los únicós ángeles que han podido acceder a la categoría de la «santidad», ningun ángel dispondrá libremente de su ser o de su voluntad.
En la Biblia existe un verdadero y unico Manual de Angelología, el libro El libro se denomina «Tobías». A partir del relato sencillo de una aventura entre un hombre y un ángel, se pueden realizar lecturas mas profundas y complejas que nos van indicando cuáles son los pasos que el hombre debe seguir para llegar a tener una fuerte relación con el mundo Angélico.
Sólo Dios es quien tiene el Poder para repetir una y mil veces la «Historia de Tobías» sobre aquéllos de sus Hijos que lo busquen a El como meta final de su peregrinaje terrestre.
Es esta «amistad» la que ha permitido construir una disciplina tan rica como la Angelología, disciplina que no acaba de enriquecerse pues cada vez sabemos más y más cosas sobre ellos.
A veces es posible dedicarse sólo a una de sus especialidades, por ser tanto tanto el material a meditar y vivenciar.
Las especialidades de la Angelología son:
1. La Biología Angélica.
2. La Hermética Angélica.
3. La Psicología y conducta Angélica.
4. La Pedagogía Angélica.
5. La Medicina Angélica.
6. La Angelología Aplicada.
7. La Teología Angélica (análisis de las relaciones entre Dios y sus ángeles).
Clasificados como están dentro de la tribu Sutil-Sutil-Burdo-Fuego, será necesario que expliquemos cuáles son las potencias corporales de los ángeles:
1. Extrema sutilidad que no impide que puedan hacerse visibles o perceptibles para el hombre.
2. Poder para llegar a mostrar solidez corporal y al mismo tiempo capacidad para atravesar cualquier cuerpo sólido.
3. Impasibilidad, por la cual no se sufre ni frío ni calor, ni enfermedad ni dolor, ni la percepción conciente de ningún deseo que no sea el de llenarse de Dios.
4. Claridad o Luminosidad. Son intensamenle brillantes, mostrando colores vivos y resplandores que enceguecen.
5. Vuelo. Logran la doble potencia sutil y vencen toda gravedad ambiental, y permitirles trasladarse rápidamente de un punto al otro del Universo
Es la gran tribu de los Angeles. Por ser sus sub-tribus tan importantes en la Economía Divina, en la Santa Providencia, y en la relación que mantienen con los hombres, esta tribu ha merecido una Disciplina especial en la Teología de la Naturaleza: La Angelología.
Por eso dedicaremos un capítulo en este libro a la descripción de cada sub-tribu. Pero recordemos siempre que es éste el lugar que le corresponde a los Angeles que, aunque manifiestan diferencias entre un coro y otro, poseen, en cambio, grandes semejanzas entre sí, como para que puedan figurar repartidos en esta clasificación de las tribus celestiales.
Hay, sí, dos excepciones:
1. La de los Querubines que forman las Estrellas. Por realizar su misión cambiando el aspecto corporal a una luminosidad fácilmente visible.
2. La de los Querubines que sostienen las Columnas de Fundamento, que estudiaremos en el capítulo consagrado a los abismos, y que tienen permanentemente una fisonomía distinta a la de sus iguales.
Estos dos grupos de Querubines merecen, por el notable cambio de forma, ser clasificados aparte. No hay más excepciones que éstas.
La mayoría de los conocimientos atesorados por la Angelología son Revelaciones que deben permanecer secretas o continuar transmitiéndose de maestro a discípulo en forma oral.
Pero siendo, como es, Voluntad del Señor que los hombres realicen con los ángeles una alianza, y como colaboran en todos los procesos de crecimiento espiritual que se vienen realizando en la tierra, es necesario, que por lo menos, brindemos una presentación mínima de tan esforzadas y buenas criaturas, para que el lector que no ha tenido contacto alguno con los ángeles comience a conocerlos, respetarlos e incluirlos en sus vidas como lo están sus seres mas queridos.
La mas antigua definición de «ángel» es la que se desprende de lo que significa esta palabra en las lenguas antiguas: mensajero.
Mensajero entre el Cielo y la Tierra.
Enviado de Dios para ayudar al hombre, colaborador del Señor en la Creación del Universo. Creación que no ha terminado, pero que está pronta a ser finalizada.
Su jerarquía, dentro de la escala de la dignidad espiritual, es menor al hombre. Pues, aunque no sufre como él y tiene la ventaja de estar cerca de Dios y percibirlo siempre con facilidad, el ángel carece de eso que Dios ha llamado «la semejanza», es decir, el «alma».
Es cierto que, al ser el alma el órgano superior del hombre por el cual, al modo de Dios, arbitra su propia libertad, muchos son los errores y falsos caminos por los que la humanidad ha andado. Y esto ha ocurrido pocas veces a los ángeles quienes, en su mayoría, no han realizado ninguna elección entre el bien y el mal, manteniéndose, por el contrario, fieles a la Bondad Suprema, sin siquiera cuestionárselo.
En todo y para todo, los ángeles sólo se movilizan por medio de un complicado sistema de comunicación que es específicamente ritual. Si éste falta, el ángel no participa, pues no se siente llamado.
Aun en el caso de que un ángel acuda a uná persona que no lo llamó, se deberá tener en cuenta que, si el Señor lo convoca ante ese hombre, lo hará por medio del cuidadoso sistema de ceremonias y gestos que conforman un ritual.
Salvo los Arcángeles, que son los únicós ángeles que han podido acceder a la categoría de la «santidad», ningun ángel dispondrá libremente de su ser o de su voluntad.
En la Biblia existe un verdadero y unico Manual de Angelología, el libro El libro se denomina «Tobías». A partir del relato sencillo de una aventura entre un hombre y un ángel, se pueden realizar lecturas mas profundas y complejas que nos van indicando cuáles son los pasos que el hombre debe seguir para llegar a tener una fuerte relación con el mundo Angélico.
Sólo Dios es quien tiene el Poder para repetir una y mil veces la «Historia de Tobías» sobre aquéllos de sus Hijos que lo busquen a El como meta final de su peregrinaje terrestre.
Es esta «amistad» la que ha permitido construir una disciplina tan rica como la Angelología, disciplina que no acaba de enriquecerse pues cada vez sabemos más y más cosas sobre ellos.
A veces es posible dedicarse sólo a una de sus especialidades, por ser tanto tanto el material a meditar y vivenciar.
Las especialidades de la Angelología son:
1. La Biología Angélica.
2. La Hermética Angélica.
3. La Psicología y conducta Angélica.
4. La Pedagogía Angélica.
5. La Medicina Angélica.
6. La Angelología Aplicada.
7. La Teología Angélica (análisis de las relaciones entre Dios y sus ángeles).
Clasificados como están dentro de la tribu Sutil-Sutil-Burdo-Fuego, será necesario que expliquemos cuáles son las potencias corporales de los ángeles:
1. Extrema sutilidad que no impide que puedan hacerse visibles o perceptibles para el hombre.
2. Poder para llegar a mostrar solidez corporal y al mismo tiempo capacidad para atravesar cualquier cuerpo sólido.
3. Impasibilidad, por la cual no se sufre ni frío ni calor, ni enfermedad ni dolor, ni la percepción conciente de ningún deseo que no sea el de llenarse de Dios.
4. Claridad o Luminosidad. Son intensamenle brillantes, mostrando colores vivos y resplandores que enceguecen.
5. Vuelo. Logran la doble potencia sutil y vencen toda gravedad ambiental, y permitirles trasladarse rápidamente de un punto al otro del Universo
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