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Bienvenidos aventureros digitales, en espacio de la gran red se encontraran con diversos temas y textos de interés, sobre todo relacionados con los temas de la vida y el esoterismo. Yo soy el que soy, Don Mario, su servidor. Estaré aquí para contestar sus preguntas, guiarlos por su camino y aconsejarlos en la vida.

viernes, 24 de agosto de 2012


Aprender a meditar

Cómo aprender a meditar

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Para aprender a meditar, a los principiantes les sugiero empezar así:
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Busca un lugar tranquilo donde no vayas a ser molestado y desconecta timbres de todo tipo; la luz tenue, unas velas y un poco de incienso de algún aroma que te resulte agradable y relajante; acomódate, sentado o tumbado, asegúrate de no tener ni frío ni calor y pon una música suave especial para relajación.*
Deja tu mente en blanco fijándote únicamente en tu respiración, inhala y exhala rítmicamente y permite, sin forzar, que poco a poco se vaya haciendo más profunda…*
Dedica unos minutos a sentir como se relajan las distintas partes de tu cuerpo, tensamos una a una cada zona unos segundos y aflojamos lentamente después; empezando por los pies vamos subiendo hacia las rodillas, caderas y pelvis, después la zona del vientre y estómago, tórax, hombros, brazos, manos, y por último cuello, cabeza y cara… Tensamos y soltamos permitiendo que se afloje, respirando despacio, profundamente.
Cuando te sientas relajado, imagina que cada vez que sale el aire de tu cuerpo se lleva emociones negativas como miedo, rabia, enfado, preocupaciones, envidia, odio, resentimientos, celos… visualiza las palabras saliendo con el aire.

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Después de varias exhalaciones sacando fuera de ti todo lo negativo, imagina que en cada inhalación absorbes luz, alegría, salud, seguridad, optimismo, creatividad, color, intuición, prosperidad… visualiza las palabras entrando con el aire.
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Es posible que al principio tu mente sea invadida por montones de pensamientos de todo tipo que van y vienen, déjalos… permíteles que lleguen, tu continua fijándote en tu respiración, tal como vienen se irán.
Como una gaviota que pasa por delante mientras tu estás concentrado en los delfines que saltan en el mar, así son tus pensamientos. Cada vez que te descubras pensando en algo, vuelve a centrarte en tu respiración.
Si no estamos habituados a meditar, empezar con 5 o 10 minutos e ir aumentado cada semana poco a poco, nos ayudará a disfrutar de esos momentos, de los beneficios que aportan e iremos comprobando que cada vez nos cuesta menos centrarnos y “oímos” con más claridad lo que nuestro interior nos cuenta.

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Te dejo una meditación guiada cortita para que empieces a practicar:

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Podemos aprender a meditar rápidamente, y utilizar la meditación para encontrar respuestas y soluciones o simplemente para acallar la mente y relajarnos, lo cual mejora notablemente nuestra calidad de vida.
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La práctica habitual de la meditación nos proporciona calma, serenidad, alegría, seguridad y desarrolla nuestra creatividad e intuición, también ayuda a entender y aceptar enfermedades con lo cual damos el primer paso para mejorarlas.
Para integrar esta práctica y convertirla en un hábito saludable, es aconsejable meditar al menos 20 minutos 5 ó 6 veces por semana.
Es muy importante ser pacientes y constantes, pronto estaremos esperando ese momento del día con alegría.*Una vez acostumbrados a meditar, veremos que podemos aprovechar muchos momentos como los que he nombrado antes para desconectar y relajarnos, en lugar de irritarnos o impacientarnos, seremos conscientes de que estos momentos son “regalos” que nos vamos a ir encontrando en el día a día.
Os invito a aprender a meditar y descubrir este maravilloso mundo de la meditación, camino hacia tu Yo interior, hacia ti mismo. Si te decides a conocerte por dentro, te aseguro que encontrarás la forma de cambiar aquello que no funciona por fuera.

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